Tiempo

Hace tiempo que no escribo,
También hace tiempo que no vivo.
Echando de menos algo que no he tenido,
Intentando comunicarme con mis sentidos.

Quiero hablar con mi alma para explicarle porque sigo,
Quiero hablar con mi corazón para decirle que solo es contigo,
Quiero hablar con el tiempo y pedirle un suspiro.

Y es que me siento en el abismo con tu ausencia.
Por más que hable con mi alma no tiene paciencia.
Por más que hablé con mi corazón no entendía lo que decía.
Por más que supliqué al tiempo solo me recordaba que no me pertenecías.

B.B

A ti mujer

Tú, mujer que yaces en la oscuridad,
Que vives en soledad,
Que sientes diariamente la maldad.
Te entiendo.

Sonríes bajo la presión de la gente,
Nadie sabe lo que sufre tu mente,
Suplicas que todo acabe rápidamente.
Y te entiendo.

Tapas los golpes con mesura,
Crees que el daño se encuentra en tu figura,
Y el verdadero dolor te esta llevando a la locura,
Te creo.

Amaste hasta que le encontraste,
Ves la vida pasar con el miedo a equivocarte,
Ya no es el hombre que idolatraste.
Y te creo.

Hoy es el dia de romper las cadenas,
Salir a la calle, saltar las barreras,
Abrir las alas y volar contra la tormenta,
La calma llega cuando te liberas.
Te espero.

Hermana, a pesar de sentirte abandonada,
Cuenta conmigo, con tu manada.
Pones fin a ser maltratada, y recuperas
tu vida como tanto añorabas.
Y te quiero.

Blanca Baena

Despertaremos

Esta dormido,

Perdido en el olvido,

No encuentra el camino,

No recuerda los motivos.

Mi pueblo cava su tumba,

No ve mas allá que la falsa luz que lo alumbra,

Creyendo que es el sol cuando es un foco que perturba.

Alimentan nuestra mente con engaños traicioneros,

Nos manejan como titiriteros,

Dividen al ser de su verdadero compañero.

Lo consiguen,

Alejándonos de la realidad que otros viven,

Perdiendo la empatía por quien suplique,

Lo aceptamos sin darnos cuenta de que nos oprimen.

Despertaremos,

Por amor a la libertad nos alzaremos,

No habrá paz para los que nos sometieron,

seremos la luz de una llama que nosotros prenderemos.

Blanca Baena

Llueve

Llueve,
Comienzan a mojarse las aceras,
Las gotas chocan en el cristal mientras suena.

El olor a tierra mojada me despierta,
Y sin quererlo un nuevo día empieza.

Nadie me enseñó a caminar bajo la lluvia sin empaparme,
siempre me olvida el paraguas en la estación de antes.

Pero hoy me enfrento a la lluvia, al viento, a enfriarme.
Culpándola de mi gran miedo a enamorarme,
negando la posibilidad de subordinarse.

Tomando las riendas de mi vida,
dejar de atormentarme,
Desnudando mi alma para al fin poder secarme.

B.B

Así nos complementamos

Sin pensarlo nos encontramos,

sentí que la vida me dio un tramo

después de tanto tiempo en el paramo,

así nos complementamos.

Puedo jurar que es todo lo que quería,

las noches grises se iluminarían.

Mi corazón con su aliento se unían

mientras el miedo desaparecía.

Quizás sea el sino quien nos ha unido,

o quizás nunca estuviéramos perdidos.

Cuando parecía que todo estaba consumido

el amor florece como un estallido.

B.B

De qué sirve

De qué sirve seguir escribiendo,
y entre versos mostrarte mis sentimientos.
De qué sirve mirar a la luna,
esperar una respuesta sin proponer una duda.

De qué sirve soñar con un romance,
si cada día veo más lejos tu alcance.

De qué sirven tantos miedos,
si cada vez que sonríes cedo.

De nada sirve tanto amor cuando no es cosa de dos.

De nada sirve mis suspiros prisioneros de tus descuidos.
De nada sirve mi lamento si no eres tú quien me lleva dentro.

¿Por qué prometemos momentos? si al fin y al cabo todo quedará en tu simple olvidó y mi amargo sufrimiento.

Blanca Baena

Hoy soñé contigo

Hoy soñé contigo.
Recordé los paseos por la playa
mientras reíamos.

Sentí como me abrazabas,

mi pecho en ese instante se relajaba.

Volví a oler tu aroma,
el viento cuando sopla lo retoma.
Oí el sonido de como pasabas las páginas del periódico,

al compás de las agujas de tu reloj, sonaba armónico.

Desperté.
Sentí un vacío en mi piel,
por todos lados tu mano busqué.

Me empeñé en mantenerte en este mundo, donde ya solo serías un vagabundo.

Tu alma ahora viaja sin que
le frenen las fronteras,
desde tu partida la mía vive detrás de una barrera.

Y a pesar de que todas las cartas que te escribo volveran al remitente
seguirá pasando el tiempo y tendrás un lugar único en mi mente.

Blanca Baena

Abismo

Me he sentido libre

a pesar de estar en el abismo, 

un falso espejismo, 

pues mi cárcel eran tus ojos 

y la libertad mi egoísmo.

B.B

Como el mar

Ella es como el mar,

calmada cuando canta nanas,

mientras te acuna en sus brazos las heridas se sanan.

Ella es como el mar,

su voz suena como las olas cuando chocan contra las rocas,

cada palabra de agradecimiento que sale de su boca.

Ella es como el mar,

libre y a la vez atrapada,

su vida está limitada a amar, a pesar de sentirse abarrotada.

Ella es como el mar,

fría en cada decisión tomada,

cálida en cada caricia dada.

Ella es como el mar,

transparente, como si pudiera leerme la mente.

Sabe que la melancolía me puede,

su beso en mi frente alivia mis penas, desaparecen.

El mar es como ella,

y aunque jamás podre igualar todo lo que me da,

sin condiciones me ofrece su vida, su alegría, su bondad.

Como mi madre es el mar,

y su eterna mirada, el lugar perfecto para navegar.


B.B

Nunca con los mismos ojos

Se volvieron a ver después de tanto
pero nunca con los mismos ojos.

Él no era dueño de su alma, se la entregó
una noche de tormenta mientras dormía,

la herida que se forjaba en su pecho le consumía.

No sangraba, no vivía, no dormía.
Y aunque no existiera culpa, nunca se lo perdonaría .

Ella aún conservaba recuerdos, su mente eliminó todo aquello que era cenizo.

A pesar de todo nunca pudo entregarse como él lo hizo,

pues aunque tuviera dos almas,  la suya nunca la quiso.

Un pájaro enjaulado que ansiaba la libertad, con querer no basta cuando se trata de amar.

Y los años pasaban, el tiempo no se detuvo en sus miradas.

Él la amaba como aquel día, 

ella simplemente añoraba aquello que jamás existiría.

Quizás nunca tenga la oportunidad de devolverte algo que en absoluto me pertenecía,
Solo espero que encuentres tu alma entre los versos de esta poesía.

Blanca Baena

Tu cuerpo

Tu piel es mi mapa del mundo,
Donde encuentro mi rumbo,
Donde me quiero perder.

Cada lunar de tu cuerpo
es un país nuevo,
Donde conservo mis anhelos,
Donde descansa mi ser.

Tu templo fielmente aclamado,

Después de haber sido abrasado
con mis cultos se va restaurando,
Donde mi mente quiere permanecer.

En el abismo de tus ojos naufragando,
El viento de tu aliento respirando,
Donde mi corazón no puede retroceder.

Blanca Baena

Esta noche y trescientas

Juego a dos bandas,
entre mi corazón y cabeza.
La botella de tequila empieza a tener flaqueza
El desorden y los planteamientos comienzan.

Pensar que nunca le tuve,
Sentir que le he tenido,
Cada día la distancia me consume,
Intento aceptar que le he perdido.

Quién querría escuchar todo lo que he sufrido,
los ganadores hacen la historia no los vencidos.
Le hice caso a la cabeza dándolo todo por rendido.
Esta noche y otras trescientas me doy cuenta de cuánto mi corazón se ha arrepentido



Blanca Baena

Te quiero

Te quiero libre,
que no contengas las ansias,que tu cuerpo vibre.

Te quiero descalzo,
notando la hierba paso a paso.

Te quiero fuerte, en cada llanto
aguantando la lluvia que te cae a canto.

Te quiero desnudo, y no solo en mi cama,
ver, sentir, cada milímetro de tu alma.

Te quiero sin más, si andarme por las ramas.

Siria

Lloraba, mientras pedía a la luna que le salvara.

Su cara dejo de ser rosada,

mudaba para ser nevada.

La acunaba, no pudo cantar más alto

que el ruido que la bombardeaba.

¿Dónde está Dios cuando más le necesitaba?

Su niña, su hija deseada, se la llevó

la guerra a una edad temprana.

Los pájaros no cantaban,

las lágrimas no cesaban.

El infierno se hizo continuo en su mirada,

el fuego ya no le quemaba.

Sí, quiero.

Sí, quiero.

Darte placer cada noche,

que se empañen las lunas del coche,

nosotros no tenemos reproches.

Sí, quiero.

acepto que te refugies en mi lecho

acariciando lentamente mi pecho.

Sí, quiero.

Que cada orgasmo nos quite las dudas,

entre mis piernas encuentres cura,

hacer de tu cuerpo una lectura.

Sí, quiero.

clavar mis uñas en tu espalda,

morderte el cuello mientras intento quedar callada.

Sí, quiero.

Que tu piel sea la mía,

que se unan en perfecta armonía,

hacerte el amor como nadie te haría.

Nos comprometimos.

Ante los ojos de un Dios que no conocimos,

ante el mar que es infinito, ante el destino,

en tu mirada se encuentra mi camino.

Blanca Baena.

Canto a la libertad

Entrar en el mar,
la sangre se congela y comienzas a temblar,
esperar hasta el último momento para poder respirar.

Pasear,
escuchar a los pájaros cantar,
leer en un banco mientras ves la gente pasar.

Suspirar,
ver la sonrisa de un ser querido,
sentir que nada está perdido,
Comprender el verdadero significado de amar.

Amistad,
tener un hermano de otra madre,
hablar sin palabras, entender la lealtad

Oler el azahar,
mientras la noche te cae encima sin avisar,
el tiempo pasa rápido y se comienza a marchar.

Puede que quizás no valoremos cada momento que la vida nos da,
y quizás no sepamos que la vida se compone de pequeños momentos de felicidad.

Sin embargo cuando pasan los años comienzas a sentenciar y desechar
el odio, la injusticia, la maldad
pidiendo un canto a la libertad.

B.B

Nada pudo ser...

No faltaban ganas, sobraban palabras,

los hechos se demostraban en la cama.

Sentir  su olor, su aliento, su piel,

pensar que nada pudo ser.

El dolor por no poderse tocar era mayor

que el de no poderse separar

Es como lluvia que cae en el mar,

como aire que no se puede respirar.




Blanca Baena

Recordando

El dolor se arraigó en el alma,
recordando.
El mar estaba en calma.
El viento acompañaba sus palabras,
recitando.

Aún conservo en mi mente su mirada despreocupada,
su sonrisa esbozada que me entrañaba,
el pelo azabache que poco a poco se convertía plata.

El mar se llevó mi libertad aquel día,
mis mejores momentos, mi alegría.
Y cada vez que susurra el viento ya no trae 
poesías, sino lamentos en cada brisa.

¿Cómo puedo recordar a alguien que no me recordaría?
¿Cómo puedo pedirle al mar algo que no cumpliría?
Solo puedo suplicarle al viento que me recite esta poesía.



B.B